Lady ________ sabía que la...
esclavitud era el destino de las mujeres capturadas por los vikingos.
Brutalmente raptada por un hombre sin escrúpulos, ella había jurado vengarse,
enfrentarse a él hasta la muerte y no someterse jamás a su voluntad.
Lo malo es que ese Vikingo era padre de Tom Kaulitz....

sábado, 17 de noviembre de 2012

"CAPITULO 20"




La primera nevada demoró en llegar y no ocurrió hasta fines de otoño. Cuando vino, una tormenta que duró toda una semana heló lagos y estanques y dejó un manto de nieve de un metro a un metro y medio de espesor. La tierra quedó melancólicamente amortajada de blanco.

Pocos querían salir a desafiar el viento helado y la nieve que caía. Tom era uno de ellos. Cuando empezó la tormenta, llevaba ausente dos semanas y cuando la nevada cesó, todavía no había regresado.

El mismo día que calmó el viento, Anselmo  vino a la casa de Tom trayendo consigo, además de su caballo, una hermosa yegua de manto plateado. Su esposa le había dicho que según a ella le había contado Linnet que ese animal en especial había pertenecido a lady ________. Ahora él llevaba tres largos meses cavilando sobre la joven de pelo renegrido. El disgusto que hacia ella mostraba su propio hijo no lo hacía sentirse mejor. Lamentaba habérsela dado a Tom, porque aunque no había venido a visitarlo personalmente en esos meses, temía que a ella no le hubieran ido muy bien las cosas con el mal humor del joven.

Anselmo  le había dado la muchacha a Tom en la esperanza de que el temple y la belleza de __________ apartarían la mente del muchacho de la perra que lo había convertido de un joven animoso en un hombre cínico y frío.

Cuando Tom buscó a la hermana de la joven, y después, un mes más tarde, habló largamente con la tía, Anselmo  supuso que el deseo que mostraba su hijo de saber más acerca de _________ era un comienzo prometedor y que pronto Tom volvería a ser el de antes. Pero después de eso, la sombría disposición de Tom no mejoró; en realidad, empeoró. Por qué Anselmo  no podía adivinarlo. Ahora Tom se iba a las montañas por períodos de varias semanas a la vez y su padre lo veía muy poco.

Las ausencias de Tom se hicieron más prolongadas y este último viaje al norte ya llevaba unas tres semanas. Aunque Anselmo  había empezado a preocuparse ligeramente por el bienestar del muchacho, esperaría unos pocos días más antes de iniciar una búsqueda, como Heloise venía pidiéndole que hiciera desde que empezara la tormenta.

— ¡Eh, viejo! ¿Dónde estáis?

Erin vino desde el fondo del establo, envuelto de pies a cabeza en una capa de pieles multicolores.

— Os oí — gruñó el anciano con voz cascada. Anselmo  lo miró con expresión de disgusto.

— Veo que Tom sigue desperdiciando pieles en los pobres infelices como vosotros los sirvientes

— Ajá, estamos mejor vestidos que los pobres que poseéis vos — replicó Erin, sonriente.

Anselmo  no hubiera tolerado ese comentario de ningún otro, pero estimaba sinceramente al viejo Erin. El hombre había servido al padre de Anselmo  y ahora servía a su hijo, y por muchos años se habían divertido intercambiando bromas y reproches con buen humor, cada vez que se encontraban. Anselmo  gruñó y contuvo una carcajada.

— Traje una nueva potranca para vuestro establo — dijo— . ¿Tenéis espacio para ella?

— Claro que tengo espacio — repuso Erin, tomando las riendas de ambas cabalgaduras— . Claro que hay espacio.

— Pero no es para Tom.

— ¿Cómo?

— No. La yegua es un presente para la muchacha celta — dijo Anselmo  roncamente— Y no olvidéis decírselo a mi hijo cuando regrese.

— ¡Por todos los santos! — exclamó Erin— . ¿Desde cuándo sois tan generoso con una esclava?

— Eso a vos no os importa, viejo gruñón. ¿Dónde está la muchacha? ¿En la casa de los esclavos?

— No. Ella vive en la casa grande.

Anselmo  se sorprendió por esta noticia y enseguida rió por lo bajo.

— Quizá, después de todo, no fui tan tonto.

— ¿Me pedís mi opinión? — replicó Erin, con sus viejos ojos brillantes de buen humor.

— ¡Ocupaos de vuestro trabajo! — ladró Anselmo  y se encaminó a la casa grande.

__________ estaba en el área de cocinar, donde pasaba la mayor parte de sus horas de vigilia, pues era el lugar más abrigado y agradable de la casa. Sobre la mesa estaban los restos de su desayuno. A un lado estaba el conejo que habían empezado a trozar para la cena, pero que habían dejado sobre la tabla de cortar.

Cuando Tom se marchó en una expedición de caza, Yarmille vino a quedarse. Exasperó a __________ con sus insistentes exigencias. Pero pasada una semana, la mujer regresó a su casa y cuando vino la nieve no volvió más. Sin su autoritaria presencia, Janie y Maudya se quedaron en su alojamiento y _________ no quiso aventurarse a salir de la casa grande para buscarlas. Ni siquiera Erin venía ahora a hacerle compañía porque había traído del depósito provisiones suficientes para una quincena y prefería quedarse en su abrigado establo.

__________ había llegado al punto en que hubiera recibido de buen grado el regreso de Yarmille. Aunque las dos no se comunicaban, la charla constante de Yarmille consigo misma era divertida y a veces interesante.

En una ocasión, ___________ descubrió que Yarmille abrigaba un odio intenso y profundo hacia Heloise y que ese odio se extendía hasta alcanzar a los dos hijos de Heloise. Esto a __________ le resultó desconcertante, puesto que Yarmille trabajaba para Tom. Se preguntó si Tom conocía los verdaderos sentimientos de Yarmille.

__________ arrojó otro leño al fuego. Después se recostó en su silla y miró fijamente las llamas danzarinas. Odiaba admitirlo, pero en realidad echaba de menos a Tom.

Cuando él estaba presente, ella vivía en un estado constante de aprensión, sin saber cuándo él le pediría algo o si ella obedecería o no. Cuando él estaba aquí, ella nunca notaba lo lentas que transcurrían las horas. Estaba alerta todo el tiempo, viva como nunca lo había estado antes. Y de noche, Dios misericordioso, de noche era un manojo de nervios, esperando y temiendo que Tom viniera nuevamente por ella. Pero él nunca lo hizo desde la noche que la tomó por la fuerza.

Estaba profundamente ofendida por el trato que él le dispensaba. Quizá lo habría perdonado si él se hubiera mostrado tierno como antes. La única noche que él se había mostrado gentil y ella había sido complaciente fue maravillosa.

_________ no podía olvidar la belleza de aquello, o el placer, como ningún otro, que él le había dado. Después, él la había abrazado en forma posesiva, como si realmente la amara, y ella había disfrutado en la proximidad compartida.

Pero esta última vez, cuando él se mostró tan cruel... Dios, cómo lo odiaba por ello. Al dia siguiente ella escapó de la casa y trató de disipar su cólera con una alocada cabalgata en el caballo más veloz que Erin le permitó montar. Eso ayudó en cierto grado. En realidad, se sintió un poco mejor cuando, al regresar, se cruzó con Coran y le ofreció llevarlo en su caballo hasta la casa.

Ahora recordó el episodio con una sonrisa.

Coran había meneado la cabeza con expresión seria y mirando el caballo con aprensión.

— Caminaré, señora _________.

— ¿Qué estáis haciendo aquí fuera en el campo? — preguntó ella, llevando su caballo hasta ponerlo a la par de él.

— Nos mandaron a Avery y a mí a buscar una vaca que se alejó del prado.

— ¿La encontrasteis?

— Sí. Ahora Avery la lleva de regreso.

— Venid, Coran — insistió ella— . No puedo soportar veros caminar cuando no es necesario. La casa todavía está lejos.

— No — se negó él otra vez.

Por fin ella adivinó los motivos de su negativa.

— ¿Nunca habéis montado a caballo? — preguntó.

El meneó la cabeza y bajó la vista. Coran era apenas uno o dos años mayor que _________. Era un joven desgarbado con una cara agradable y que nunca se quejaba de su forzada servidumbre. Ella estimaba a Coran y no pudo evitar reirse de sus temores.

— Es hora de que aprendáis, Coran. Venid. Creeré que no os gusta mi compañía si volvéis a negaros.

Por fin él cedió con una tímida sonrisa y ella lo ayudó a montar en la grupa. _________ hacía mucho tiempo que no se sentía tan despreocupada, y con un brillo travieso en sus ojos grises, azuzó a su caballo con los talones y partieron a la carrera. Coran se aferró desesperadamente de la cintura de __________, como si temiera por su vida, murmurando plegarias al oído de la joven. Pero _________ rió con alegría y aceleró la marcha, haciendo que Coran la aferrara con más fuerza.

No vio al jinete que desde una colina observaba sus travesuras con Coran. Nada le importaba en ese momento excepto que por un rato, por lo menos, su vida parecía más llevadera. Pero no duró mucho. Ni bien vio el rostro colérico de Tom y comprobó que él no se disculpaba por el duro tratamiento que le había dado, nuevamente se sintió furiosa.

_________ suspiró con tristeza. El la ignoró dos largos meses. Después empezó a salir de cacería y a ausentarse por varios días a la vez. Cuando no salía en sus expediciones volvía a la casa muy tarde. Ella se preguntaba si había estado con Morna. O quizás, había ido a buscar a Janie o a Maudya en su alojamiento.

¡Quizá las esclavas de su padre, hasta Cordelia, eran más de su agrado! En esas ocasiones, _________ caminaba de un lado a otro cada vez más furiosa. Se decía que tenía todo el derecho de estar ofendida, pues hubiera podido encontrarse durmiendo cómodamente en su cama en vez de tener que aguardar el regreso del amo.

Una noche en particular, cuando Tom llegó muy tarde por tercera vez consecutiva, _________ fue a acostarse pese a su tardanza. Por fin él llegó, de un humor violento, alcoholizado, y aunque su comida estaba calentándose sobre las brasas, la despertó y la arrastró por la escalera para que lo sirviera.

Su actitud era belicosa y no admitía negativa, pero _________ estaba demasiado furiosa para temerle. Llenó un tazón de madera con sopa humeante y lo dejó sobre la mesa, derramando sobre Tom la mitad del contenido. Sabía que Tom debió sentir dolor, pero el hecho de que no lo demostrara la calmó un poco. El la despidió y ella se retiró rápidamente.. Al día siguiente no se dijo una sola palabra sobre el incidente.

___________ se sobresaltó cuando oyó los fuertes golpes en la puerta. Sintió que el pulso se le aceleraba, porque sólo Tom podía anunciarse así. El se preguntaría por qué la puerta estaba atrancada. Ciertamente, todas las puertas eran cerradas con tranca desde que ella salió una mañana por agua y encontró un perro muerto en el umbral. Yarmille se puso blanca cuando vio el animal casi despedazado, pero no dijo nada, dejando a __________ en la incertidumbre sobre quién pudo hacer una cosa semejante.

Abrió la puerta, preparada para decir a Tom por qué la había cerrado con tranca. Pero allí estaba Anselmo , envuelto en una gruesa chaqueta de pieles que lo hacía parecer dos veces más enorme de lo que era. Verlo fue un golpe para ella, pero en menos de un segundo sus ojos relampaguearon de furia.

No lo pensó dos veces, corrió hasta la mesa y tomó el cuchillo que había estado usando para cortar el conejo. En su ciega furia fue descuidada. Se volvió para atacar, pero Anselmo  ya estaba detrás de ella. La tomó de la muñeca y con la otra mano fue abriéndole los dedos hasta que el cuchillo cayó al suelo. Después la hizo a un lado y ella cayó sobre la silla que estaba junto al fogón, casi derribándola.

Allí se quedó, respirando agitadamente, y vio que él levantaba el cuchillo y enseguida miraba a su alrededor para ver si había otros en la habitación, antes de cerrar la puerta. Cuando por fin la miró, sus ojos, los de suave color azul y los de un gris borrascoso, quedaron como clavados y pareció que pasaron horas hasta que él se movió. Anselmo  caminó hasta la mesa, apartó el largo banco y se sentó a horcajadas sobre él.

— No quiero haceros daño, muchacha — las palabras de Anselmo  brotaron roncas. Se aclaró la garganta y continuó, en tono más suave — ¿No podéis comprender lo que digo? ¿Todavía no aprendisteis a hablar en mi lengua?

__________ no parpadeó ante la pregunta y siguió inmóvil. Lo miró con recelo. ¿Qué razón tenía ese hombre para venir aquí en ausencia de Tom?

Anselmo  jugó con el cuchillo que tenía en sus manos e inclinó la cabeza, mirando la larga hoja que brillaba a la luz del fuego.

— No esperaba menos de vos — dijo en un suave susurro.

__________ frunció el entrecejo. ¿De qué estaba hablando? Tuvo que esforzarse para seguir escuchando cuando él continuó.

— No debía venir, supongo. Es demasiado pronto para que hayáis olvidado lo que hice, o para que comprendáis la razón que tuve. Yo odiaba a vuestro pueblo, muchacha, por lo que le hicieron a mi hijo. Cuando tengáis un hijo vuestro comprenderéis. Tom pudo perdonarlos porque aprendió compasión de su madre, pero yo no. Nosotros somos un pueblo orgulloso y vengativo, pero me equivoqué al querer vengarme de vos y de vuestra familia pues vosotros no teníais culpa alguna. Fueron los celtas norteños quienes hicieron prisionero a mi hijo y lo encerraron en una sombría mazmorra durante un año, cuando él sólo tenía diecisiete años. Le negaron alimento, excepto una bazofia ni siquiera apropiada para los perros. Lo torturaron por diversión, pero tuvieron cuidado de no matarlo, porque su intención era usarlo contra otros vikingos que fueran a atacarlos. Cuando Tom escapó y regresó a nosotros, era apenas un esqueleto. Le llevo más de un año recuperar todas sus fuerzas y sanar de sus cicatrices.

Anselmo  levantó la vista hacia _________ y la miró con sus ojos azules llenos de tristeza.

— Sé que no entendéis lo que estoy diciendo, muchacha. Oís mi voz, pero no comprendéis mis palabras. Así es mejor — suspiró.—  Os estimo mucho, muchacha. Admiro vuestro coraje y lamento haberos arrebatado de vuestra tierra. Esto, sin embargo, vos nunca lo sabréis, porque yo soy un hombre muy orgulloso. Nunca os diría estas palabras si vos pudierais entenderlas. Pero por lo menos puedo tratar de hacer una reparación y esperar que un día no me odiéis como me odiáis ahora.

__________ estaba tentada de hablar a Anselmo  en su lengua, para que supiera que ella entendía cada palabra. Eso le hubiera dado cierta satisfacción al humillarlo en esa forma, pero no quiso revelar el secreto que podría servirle de mucho cuando estuviera lista para escapar. Además, sentíase turbada por lo que su propio pueblo había hecho con Tom y entendía por qué Anselmo  pudo querer vengarse, aunque no estaba dispuesta a perdonarle lo que él y sus hombres hicieron en su tierra. Después de todo, Tom se había arriesgado a que lo capturaran cuando decidió hacer una incursión contra el pueblo de ella. Sin embargo, hubieran debido matarlo al hacerlo prisionero y no conservarle la vida para torturarlo por diversión.

Anselmo  se puso de pie y dejó caer sobre la mesa el largo cuchillo. _________ lo vio caer y enseguida volvió a mirar al enorme vikingo.

— Sí, sé que me mataríais si tuvieseis la oportunidad — dijo Anselmo  con su habitual hosquedad— . Pero no lo intentéis. Todavía no tengo deseos de morir con tantos años de luchas por delante, cuentas que arreglar y nietos que ver y tener en mis brazos antes de reunirme con Odín en el Valhala.

Anselmo  se acercó al fuego para calentarse las manos. Fue como si desafiara a _________ a que se apoderase del cuchillo que estaba sobre la mesa. Eso, o quería demostrarle que estaba dispuesto a confiar en ella. Prudentemente, ella siguió donde estaba.

El continuó hablando, quizá para aliviar su conciencia.

— Desde que por primera vez puse mis ojos en vos, muchacha, habéis pesado mucho en mi mente. Pero veo que habéis vivido bien aquí, en el hogar de mi hijo — la miró con expresión taimada— . Sí, habéis vivido bien, aunque el humor de Tom se ha vuelto más negro que antes. ¿Sois vos la causa? — súbitamente gruñó— . ¡Bah! Como si fuerais capaz de responderme aunque entendieseis lo que os digo. Soy siete veces tonto por hablar con una muchacha que no sabe nada de lo que le digo. Y más tonto, aún, por haberle regalado una hermosa yegua a una joven esclava. Que se adueñó de mí para tomar esa decisión... bueno, ya está hecho. A Tom no le gustará, pero quizás os permita cabalgar en la yegua plateada cuando sepa que fue vuestra en vuestra tierra.

__________ tuvo que bajar los ojos para que él no viera la súbita alegría allí reflejada. No podía creerlo. ¿Willow aquí? ¡Y entregada a ella! ¡No a Tom, a ella!

Anselmo  se acercó a la puerta para marcharse. __________ miró con curiosidad la espalda del vikingo. ¿Por qué habrá hecho eso? Después de todo lo que la había hecho pasar, era inconcebible que ahora se mostrase tan amable. Como en respuesta a la silenciosa pregunta, Anselmo  se volvió desde la puerta.

— Erin os contará lo de la yegua. No espero que esto cambie vuestros sentimientos hacia mí, muchacha, pero es un comienzo — rió por lo bajo— Mi acción ciertamente os dará ocasión de preguntaros cuáles fueron los motivos.

Cualesquiera que fueran esos motivos, Willow estaba aquí y nuevamente era de ella. Ahora tenía una razón para aventurarse al helado invierno. Necesitaría pantalones para cabalgar con comodidad y protegerse del frío.


CHICAS... aqui estoy con nuevo capi ...=)  Tengo que decirles que estoy ultracansada.. recorri todo el centro con mi mamá xd quede agotadisim.. y Acabo de llegar a mi casa... pero en verdad no podia dejarlas sin capi.. por eso les subo.. eso si.. mañana no voy a poder subir capi.. pero si o si.. el Lunes sin falta les subo..Espero les guste el capi...

Para aclaracion de TODAS.. "LOKI"... es  el Diablo para los vikingos...... osea que cuando Tom dijo "Que Loki se la lleve".. queria decir que el diablo se la llevara... xd jajaja yo les dije que iban a pasar con peleas jajaja xd.. espero que haya quedado aclarado todo ajajaja..

Cuidence
Las Quiero
BYE =D

3 comentarios:

  1. que le pasa a tom donde estaaaa? cuidate lo esperooo besotes.

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  2. Awwww que emocion su yegua estara con ella!! Me fascina la fic :D
    vamos Tom disculpate con (tn) .. Igual Alselmo no me cae mucho.. Asi q en realidad Yarmile odia a Eloisa?? Yo pense q no.. Ahhh Lucky es el diabloi hermama q tambien lee me dijo eso tambien xD
    Esta muy emocionante la fic..
    Esperare ansiosa el lunrs..

    Yo tambien cuando salgo de compras llego agotadisima..
    Bye cuidate :D y descansa

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  3. jajjaaja tan duro que parece por fuera Anselmo... y es un gatito con sentimientos!! jjajaja :D
    No me quiero ni imaginar como va a reaccionar tom cuando vea que el padre le regalo la yegua! C:
    Como me voi a descostillar de risa cuando todos se enteren que ella entiende la lengua de los vikingos!! jajja
    Quiero que se Lunes!! :)
    Bye, besoss y Cuidate! ♥

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